Y ahora busco en los rincones tu nombre, tus pestañas y tu manera de vivir. Sabias que el viento nunca te encontraría. Las toallas tirada demasiado pronto se secaban antes a tu lado que al sol y la luna parecía envidiosa de tu belleza. Guardabas secretos inconfesables e historias inauditas que ni el mismísimo silencio sabia mantener. Eras el único que podía hacerme hablar mientras las lagrimas podían conmigo, que tu me enseñaste a tirarlo todo fuera, aunque fueras tu el que tuviera que aguantarlo. Me cojias el dedo meñique con toda la mano y me decías "bienvenida a mi corazón pequeña, si paras de llorar te prometo que nunca saldrás de el". Y sin soltarme el dedo me hacías bailar al ritmo de tu respiración y me sentía mas ligera que las nubes. Y mientras en mi mesita Carolina se enamora, yo ya estaba muerta por tus huesos. Solo quiero que ahora vuelvas, antes de que el febrero me alcance hasta la sangre.
E'O
me encantaa tu forma de escribirrr :) jajaj te sigooo :P
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